La sabiduría es una energía que nosotros tenemos dentro de nuestro corazón, en esa chispa divina, en el centro de la misma, se encierra esta virtud, disponible a todo SER humano. Es una virtud tan importante que con pensarla, o verbalizarla, logramos alinear nuestros cuerpos inferiores y conectarlos con lo Superior, en forma inmediata. Es la frecuencia vibratoria tan alta, que nos permite actuar con un desapego, con un verdadero respeto. En todo aquello que podriamos observar y no ser necesario opinar. Bueno la opinión, la mayoría de las veces no es necesaria, unicamente cuando se nos solicita y también podemos opinar en forma muy sutil, par seguir respetando a la persona, su punto de vista, hasta su gusto en elegir tal o cual. La sabiduría nos lleva a vivir la vida, a agradecer cada día, a haber vivido esto que dice el poeta "nunca muere aquel que vivió". Porque en el pasaje por esta vida, vivió para su bien y para bien de muchos. Compartiendo, enseñando, transmitiendo dejando cosas hechas que pueden pasar los años, y se lo sigue recordando, sigue estando presente.
La sabiduría es poder ver y mirar, sin juzgar. Es valorar cada minuto, para abanzar y dejar frutos, desde el amor, desde el respeto, desde la sabio. Hasta el próximo encuentro.